martes, 1 de mayo de 2012

CONTRAVENENO URGENTE


Ultra tosigoso    Mediante un operativo que supera los balbuceos jurídicos de sus propulsores, con la reforma del Código Civil están intentando aniquilar los vestigios de la vieja Argentina. Acomodándola al modelo materialista  marxicubano, con algo  comparable a la infección de todas las aguas de un pueblo.  Porque de hecho, semejante  estropeo  -acaso indefectible de no haber reacciones condignas- lisa y llanamente significa pervertir las normas jurídicas que regulan las relaciones generales y cotidianas de todas las personas, desde su nacimiento hasta la muerte. Aquello que, como es sabido, constituye el ancho ámbito del Derecho común, eminentemente comprendidas las relaciones de familia. Pero el proyecto no sólo avanza sobre la primera célula de la sociedad, porque sin detenerse recoge las peores  audacias tecnológicas inventadas contra la naturaleza creada por Dios. En un mar de contradicciones, falsedades y confusiones típicas de los engendros del Padre de la Mentira.                                  
Antídoto inmediato   Sin la menor exageración -y a favor de una sana respuesta- cabe resaltar que  sus autores muestran  el bajo nivel en altos peldaños judiciales. Sus paradójicas extravagancias pues, requieren el rechazo a "libro cerrado”, junto a la pertinente recriminación por el ataque deletéreo que encubre la inventiva.  Asimismo, todo indica la inconveniencia del diálogo, que fatalmente  habría de redundar  en una coparticipación de la maldad… cuando termine sancionada, con los retoques de circunstancia. Sin inmiscuir en materia que supera al lego, cabe recordar aquella prudente recomendación de no dialogar con el demonio o sus congéneres. Y con plena autoridad de la memoria fresca, también corresponde recordar las consecuencias de los intentos dialogantes. Principalmente por los “frutos” de  la Ley Nacional de Educación (laica  y promarxista) y de las congruas disposiciones a favor de la Educación Sexual (con respectivo manual pornográfico).        


Advertencia secular  Puede servir de apoyo a todo esto, lo expresado por un antiguo diario de Córdoba –Los Principios- al conmemorarse el cincuentenario del Código Civil vigente. Allí se consignaba la conspiración, ya en marcha por entonces, que precisamente ahora quiere concretarse. Dice el ilustre cronista: “…Nuestro Código ha sido valla insalvable para los que buscan la disolución de la familia y la destrucción de la sociedad civil. Creemos en la necesidad de reforzar esas instituciones a fin de salvarlas de la tempestad que las azota” (“Cincuentenario del Código Civil – homenaje al doctor Vélez Sarsfield. Los Principios, 30 de Septiembre de 1919”).
Abril de 2012                          Juan E. Olmedo Alba Posse